Los cuidados del Carlino

Los pelos en esta raza son rígidos, se clavan pertinazmente en los tejidos y resultan incómodos de limpiar. Un buen consejo es, en la época de muda intensa, adelantar los baños. El agua caliente y el uso de una buena cosmética nutritiva estimulan la renovación del pelo de manera que el perro nunca se verá pobre de capa.

BAÑO
Principalmente el baño es para limpiar en profundidad y recuperar el grado de nutrientes de la piel y del pelo.

Se debe seleccionar un buen champú hidratante con un alto grado en nutrientes que hidraten pelo y piel al máximo.

Es muy importante utilizar cosmética con un pH similar al pH de la piel del perro (sobre pH 7). Utilizar una cosmética ácida tiene consecuencias negativas. Limpian y nutren superficialmente. La piel y el pelo se resecan observando perdida de brillo y posibles picores y caspa.

Bañe cada veinte días. Pero si se ensucia, no dude en adelantarlo. Una buena cosmética se lo permite sin perjudicar la salud de la piel.

Preste atención especial al interior de los pliegues de la cara. El champú debe penetrar hasta su parte más profunda. Se trata de eliminar la sudoración y bacterias que se forman y que son los causantes del mal olor y del deterioro de esa piel.

Si tiene un ejemplar de piel extremadamente sensible, que tiende a escamarse o a irritarse con facilidad, báñelo todas las semanas con el Champú de Raíces del Árbol del Té de Kw. Contiene un antiséptico natural muy eficaz. Es un champú hidratante que puede ser extraordinario incluso como champú habitual.

Tras aclarar el champú, aplique un buen acondicionador, aunque no se trate de pelo largo.

Ha de saber que la mayor parte de los nutrientes se depositan con los acondicionadores. Asegúrese también de que su pH sea el adecuado (pH7.5).

¡¡¡Muy importante!!! No olvide limpiar los oídos en cada baño. Utilice un buen líquido limpiador para ayudar a disolver el cerumen. También, aproveche que las uñas se han ablandado en el baño para cortarlas.

SECADO
Es momento de pasar a secar. Seque con esmero. No deje humedad en los pliegues.

ENTRE BAÑOS
Revise el interior de los pliegues con frecuencia. Límpielos con una gasa empapada del líquido limpiador Antilagrimeo Kw. Es un bactericida que elimina las impurezas y el mal olor. Aproveche también para limpiar ojos y lacrimales con el mismo producto. Muy importante, “sin olvidar utilizar gasas limpias”.

La piel y el pelo necesitan de nutrientes también entre baño y baño.

Utilice un acondicionador especial para aplicar entre baños. Hay sprays acondicionadores especialmente diseñados para ello. Una vez aplicado, masajee con las manos para ayudar a que el acondicionador penetre hasta la piel y finalice cepillando con un buen cepillo de cerdas naturales.

CEPILLADO Fuera de muda: Utilice un cepillo de goma. Además de dar un agradable masaje a la piel, ayuda a que las células muertas de la piel y el pelo muerto se desprendan. Para abrillantar utilice un cepillo de cerda natural. En temporada de muda: Bañe semanalmente. Previo a cada baño, pase una cuchilla de trimming o el Pet Vaciator. Está práctica junto a una correcta hidratación, acorta el periodo de muda de manera sorprendente.

Foto: El Mundo del Perro – Alberto Nevado.

CEPILLADO
Fuera de muda: Utilice un cepillo de goma. Además de dar un agradable masaje a la piel, ayuda a que las células muertas de la piel y el pelo muerto se desprendan. Para abrillantar utilice un cepillo de cerda natural.

En temporada de muda: Bañe semanalmente. Previo a cada baño, pase una cuchilla de trimming o el Pet Vaciator. Está práctica junto a una correcta hidratación, acorta el periodo de muda de manera sorprendente.

RETOQUE FINAL
Retoque con una tijera de dientes finos la zona del rabo, cuello y trasera. Solamente esos pocos pelos largos que sobresalen y afean la capa.