Los perros y el trabajo desde casa – Consejos de Julius-K9®

Nuestro perro hasta ahora estaba acostumbrado a que después del paseo matinal se quedaba solo en el piso o en el jardín, pasando la mayoría de su tiempo descansando. No obstante, para él es un gran cambio si todo el día estamos en casa. Especialmente si en la familia hay niños, cuyo ruido puede cansar a los perros más sensibles. No es sorprendente pues, que experimentemos que el perro se pone inquieto y no encuentra su lugar o siempre está cerca de nosotros.

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¿Qué podemos hacer para facilitarle este período?

• ¡Asegurémosle tiempo de descanso para él! Su cama debe estar situada en un lugar calmado adonde pueda retirarse. La caseta o el box plegables para perros pueden servir de gran ayuda en este caso. (Si nuestra mascota no lo conoce todavía, necesitamos acostumbrarla. Dejando abierta la entrada, démosle de comer en su caseta, démosle delicias y premios si entra por sí mismo a su lugar.)
• ¡Prestemos atención especial a nuestra mascota, si hay un niño en la familia! El juego ruidoso, las carreras y el comportamiento imprevisible de los niños pueden ser fuentes de estrés para nuestro perro. En este caso podemos encerrarlo por algunas horas en el dormitorio para que pueda descansar tranquilamente.
• ¡Intentemos cambiar lo menos posible en la rutina diurna de nuestra mascota! Los paseos deberán ser programados en su tiempo habitual, pero si las circunstancias lo permiten, pueden ser más largos. ¡Aprovechemos el tiempo que ganamos por no tener que viajar a trabajar!
• ¡Las reglas de casa deberán permanecer en su lugar! Si hasta ahora no le hemos permitido subir al sofá, esta vez tampoco lo hagamos. Más bien, sentémonos en el suelo y llamémoslo si queremos darle un masajito.
• A veces dejémoslo solo, por ejemplo, al irnos de compras o a un paseo.
• Si por causa de las regulaciones locales solo podemos salir de casa de forma limitada, tenemos que compensar el movimiento perdido con actividades en casa. ¡Enseñarle trucos es una excelente diversión!

¡Prestemos atención a nosotros mismos!

Puede acontecer que experimentamos un cambio en el comportamiento de nuestra mascota a pesar de que nuestra vida cotidiana no haya cambiado nada porque hasta ahora, de todas formas, trabajábamos en casa. En este caso la causa del cambio hay que buscarla en nosotros mismos. La incertidumbre vivida por causa de la pandemia puede conllevarnos a un estado de ansiedad que nuestro perro también puede percibir. Por esto, es posible que el perro se vuelva más apegado a nosotros, o, al contrario, no busque el contacto con nosotros. Si experimentamos esto, intentemos liberarnos de las angustias, meditemos o realicemos ejercicios de respiración antes de pasar tiempo con nuestra mascota.

¡Pensemos en el futuro!

Junto a las medidas de distanciamiento social es comprensible que queramos compensar la falta de contacto social a través del contacto con nuestra mascota, puesto que mucha gente tiene a su perro por este sencillo motivo. Pero no podemos dejar de tener en cuenta la cuestión de qué será con nuestro perro después del virus. Pues, llegará el momento cuando volvamos a ir a trabajar o a cualquier otro lugar sin nuestra mascota. Después de pasar mucho tiempo juntos, será muy difícil la separación. Por lo tanto, no importa cuánto disfrutemos de poder estar juntos todo el tiempo, vale la pena seguir las reglas anteriores para prevenir futuros problemas de comportamiento.

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